El lenguaje de los sueños está formado
básicamente de imágenes, sentimientos y emociones. Es la forma que tiene el
inconsciente de expresarse.
Dibujar o pintar las imágenes de un sueño
puede ser una forma agradable de darles vida ya que la mayoría de sueños están
compuestos por imágenes y acciones
simbólicas y arquetípicas.
Por Darío Nogués |
Pintar un sueño tiene el valor y cuenta con la ventaja de que no
necesitamos saber qué quiere decirnos. Sólo hace falta, adentrarse en
él, tan solo contactar con el sueño y el significado irá apareciendo de manera
natural.
Explorar los sueños desde la creación pictórica
supone aprender a comunicarse con ellos en su propio lenguaje. Su expresión nos
ayuda a proyectar fuera de nosotros mismos los símbolos y los arquetipos que
están dentro de nosotros y de esta forma poder reexperimentar conscientemente
el sueño, integrando su energía y su significado.
Hay que tener en cuenta una serie de
factores a la hora de acercarse al sueño desde el dibujo o la pintura.
Primero de todo, tener presente el
sueño, saborearlo, sentirlo dentro, revivirlo.
Seguidamente, con el material preparado y a mano, dibujar,
pintar libremente sin entrar en el sentido estético, solamente hacer como si el
sueño te poseyera y a través tuyo se materializara en la lámina o papel.
Una vez acabado, visualizarlo
detenidamente, sin prisas ni impaciencia para ir acercándose a descifrar su
significado. Es posible que requiera de
tiempo y que la información aparezca en forma de flashes mentales los
cuales nos darán sentido. Tener paciencia y abrirse a cualquier
posibilidad facilita la comunicación con el inconsciente y con los sueños.
Los sueños han sido y son fuente de inspiración
para artistas. De ellos extraen imágenes y motivos que expresarán en
sus obras. Vean este fragmento de "Los sueños de Akira Kurosawa"
“Sueño
mis pinturas y luego pinto un sueño”
Vincent
van Gogh
Utilicemos los sueños para crear. Adentrémonos, creando, en el lenguaje de los sueños